El magnesio es un mineral crucial y sumamente importante para una salud óptima, desempeñándose en un amplio espectro de funciones biológicas inluyendo entre otras:
- activación de músculos y nervios
- creando energía en tu cuerpo por activación del trifosfato de adenosina
- sirviendo como un bloque de construcción para la síntesis de ARN y ADN
- favorece la formación de neurotransmisores como la serotonina
- colabora junto con las proteínas y la vitamina C en la formación del colágeno
- colabora en la regeneración de cartílagos y articulaciones por lo que previene enfermedades como la artrosis
- relajante muscular y del sistema nervioso central
Algunas personas obtienen suficiente magnesio en su dieta en estos días aunque es común padecer el déficit de este mineral. Mientras tanto, la gente suele tomar calcio de más o en altas cantidades. Esto puede causar más daño que bienestar, ya que es muy importante contar con un equilibrio adecuado entre estos dos minerales.
Si tiene exceso de calcio y de magnesio no es suficiente, puede haber consecuencias negativas para la salud.
El magnesio es crítico para la salud del corazón, ya que cantidades excesivas de calcio sin el contrapeso de magnesio puede conducir a ataques de corazón y muerte súbita.
El corazón tiene la mayor cantidad de magnesio en el cuerpo, específicamente en el ventrículo izquierdo. Con una cantidad insuficiente de magnesio, su corazón simplemente no podrá funcionar correctamente.
El déficit de magnesio en forma prolongada, ocasiona: dolor articular, calambres, contracturas, taquicardias, vértigo, espasmos en párpados, espasmos en esófago, estómago o intestino, hormigueo en torno a la boca, hipo, entre otros.
Gracias a tomar una dosis mínima de 3 mg de magnesio diario, se evitará la hipertensión, trombosis, taquicardias, infartos, dolores articulares, retinopatía, úlceras, ciática, migrañas, verrugas, sentimientos de angustia, cálculos renales, rinitis alérgicas, estados depresivos.